La trata de personas

La trata de personas es un hecho lamentable que crece en Argentina sin encontrar una solución certera y precisa por parte de las autoridades, esta aumentando, junto con los por qué de un negocio que entristece a la sociedad.

En los últimos años se triplico la suma millonaria que este negocio deja, lamentablemente este problema social esta tan alejado de la atención gubernamental que ciertos políticos se sienten en la libre vía para atenderlo y no es precisamente para combatirlo...

Desde 1904 hasta 1949, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) suscribió Acuerdos con países afectados por este mal social, tendiente a prevenir sobre la TRATA DE PERSONAS. Esto es un negocio viejo con nombre nuevo.

Si tan solo en las Políticas de Estado (nacional y provincial) se establecieran los siguientes puntos otra seria la historia:
1.- Control efectivo y selectivo del desplazamiento urbano.

2.- Protección de Zonas Fronterizas sensibles.

3.- Libre acceso al Mercado Laboral.

4.- Plan Fronteras, móvil y dinámico.

En Tucumán, el negocio de la explotación sexual tiene como amos y señores a miembros de la fuerza policial. Se unen en relaciones comerciales a las perversas redes de prostitución que funcionan en todo el país e internacionalmente.
Actualmente en esta provincia existen 32 prostíbulos habilitados por la Municipalidad capitalina y el Instituto Provincial de Lucha contra el Alcoholismo (IPLA) bajo la fachada de “bares”. En algunos hay stripers, por lo cual son catalogados como “bares con espectáculos”.
Según fuentes extraoficiales, la mayoría de los dueños de los prostíbulos son policías, algunos retirados y otros en actividad. Carlos Garmendia, abogado de la Fundación María de los Ángeles declara que “en la actualidad no se aplica la ley 12.331 que prohíbe explícitamente el establecimiento de casas o locales donde se ejerza la prostitución o se incite a ella. Esta ley prevé multas en una primera oportunidad, y en caso de reincidencia las penas llegan a prisión”.
Salta es una provincia fronteriza, por lo tanto uno de los puntos mas sensibles para capturar a las victimas y ahí es donde la Oficina promovida por el Ministerio de Seguridad y DDHH de la provincia, denominada DIVISIÓN TRATA DE PERSONAS, dependiente de la Brigada de Investigaciones de la policía DEBERIA tener puesta toda su atención. Una de las tantas preguntas que surge es… ¿Por qué y para que se guardan la verdadera información que manejan JUECES PENALES DE INSTRUCCIÓN, el Secretario de Seguridad y la propia fuerza de seguridad?, si lo correcto seria que llegue a los MEDIOS de COMUNICACIÓN para alertar y prevenir a la Opinión Pública! Contrariamente lo que hacen es lanzar campañas de “prevención” sosas y de poca contundencia…
Pretender hacer creer que “tal información estratégica” NO EXISTE, es subestimar la inteligencia del salteño, ya que ellos, (Jueces y otros) mantienen el elevado y erróneo concepto de que sus actuaciones deben ser absolutamente secretas. Nadie debe saber y conocer lo que ellos manejan en realidad y así comienza el paulatino proceso de desinformación y desidentidad social de una comunidad que debiera ser organizada y enseñada que no es común que se desaparezcan mujeres y niños; y solo se la preocupen efímeramente cuando escuchan, miran o leen la noticia del día en los medios locales.
Las causas de la TRATA más sobresalientes son: pobreza, discriminación, desigualdad de género, falta de oportunidades económicas y el NO acceso al mercado laboral.
Además, es redundante acotar que este cáncer social, se convierte en un problema de SEGURIDAD y SALUD PÚBLICA. Si se logra através de los medios de comunicación sensibilizar a la sociedad y generar la Cultura de la Denuncia contemplando un enfoque global de la reconocida y universal Teoría de las 3 P (Persecución de los Tratantes, Procuración de Justicia y Protección de la Víctima y Prevención de la Trata), se podrá pedir que apliquen una legislación punitiva acorde en tiempo y forma. Y esto seria un gran paso para tener a nuestras mujeres y niños protegidos y así no llevar al “suicidio” a nuestra sociedad.